¿Cómo un estafador elige su objetivo?
El fraude es un azote para las empresas, que trabajan bajo una amenaza constante e imprevisible.
Los estafadores utilizan técnicas cada vez más sofisticadas y violentas. Para lograr sus objetivos, siguen una serie de pasos. En primer lugar, el estafador elige su objetivo.
¿A qué empresa atacará? Para elegir, tiene que evaluar los criterios determinantes: su objetivo, los riesgos, el número de empleados, etc. ¿Qué proceso de selección se pone en marcha?
Paso 1: El defraudador define el objetivo del fraude
En primer lugar, el defraudador debe determinar qué tipo de fraude quiere llevar a cabo.
Esta elección se hace en función de su objetivo y de lo que quiere obtener de su fraude: ¿dinero, datos personales…?
Cuando el objetivo es financiero, el estafador debe determinar una cantidad. Este criterio es decisivo a la hora de elegir su objetivo, una gran empresa tendrá más posibilidades de pagarle una gran suma.
Los riesgos
A continuación, el defraudador analiza los riesgos que asumirá al llevar a cabo su fraude.
En caso de fracaso, los riesgos no son los mismos. Una empresa española no está sujeta a la misma legislación que una empresa estadounidense. En función del capital de la empresa, la indemnización a pagar es diferente. Este criterio es tan decisivo como el objetivo financiero.
El presupuesto
El defraudador debe determinar el coste del fraude: el equipo necesario y los diferentes recursos que tendrá que poner en marcha.
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Paso 2: El estafador elige la empresa
En función de sus objetivos, el estafador elige una empresa para defraudar. Para ello, utiliza varios criterios para elegir el objetivo perfecto:
- La empresa debe poder pagar: si quiere ganar 1.000.000 de euros con el fraude, debe dirigirse a un grupo grande. Elegirá una empresa en la que estas transacciones sean habituales.
- La empresa debe estar muy poco concienciada sobre el fraude: los defraudadores eligen empresas para las que la concienciación sobre el fraude bancario no es una prioridad y cuyo conocimiento del tema es menor.
- La empresa debe tener muchos empleados divididos en diferentes áreas: cuantos más departamentos haya en la empresa, menos posibilidades habrá de comunicarse fácilmente. Esto hace más difícil que la persona que podría hacer una transferencia consulte las opiniones de otros colegas o realice comprobaciones. Esto facilita el fraude.
Trazar el mapa de la empresa objetivo
Una vez elegida la empresa objetivo, el estafador realiza un mapa detallado de la misma:
- Identificación de perfiles: a menudo a través de las redes sociales (Linkedin, facebook, etc.), el estafador establece una lista inicial de empleados. ¿Cuánto tiempo lleva la persona trabajando en la empresa, cuál es su cargo, cuáles son sus relaciones?
- Creación de un organigrama: después de haber establecido una lista de empleados, el estafador reúne sus perfiles y los organiza. Reproduce el organigrama de la empresa para establecer el papel de cada persona y su jerarquía en la empresa.
- Relaciones: el defraudador también estudia las relaciones entre los empleados en el ámbito profesional y privado.
Los estafadores tienen un método de trabajo preciso y riguroso para elegir su objetivo «ideal». Una ejecución de este tipo requiere meses de preparación: acaba de ser defraudado, pero en realidad ha estado bajo vigilancia durante un año.
Una vez que el estafador ha establecido su objetivo corporativo, debe elegir un proveedor para hacerse pasar por él.
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